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La misión en Bangkok

Juanita Madrigal
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05 Octubre 2018

Trabajar en La Evangelización en Bangkok es diferente que hacerlo entre las tribus o en las zonas rurales del norte de Tailandia ya que aquí es una gran ciudad.

 La Iglesia está ya estructurada y las personas llegan personalmente buscando a alguien que los introduzca en el conocimiento de Jesus. Hay personas protestantes,

pero en su mayoría son budistas los que llegan buscando una respuesta a sus preguntas. Hay jóvenes y hay adultos.

Además de trabajar en la promoción de la mujer con dos grupos, colaboro preparando los líderes con los cuales llevamos adelante los catecúmenos que se preparan al bautismo. Además  las personas que no pueden asistir a este grupo, los preparo personalmente un día entre semana en mi casa.  Después de bautizados se les prepara por otro año a la confirmación; una vez confirmados se les da la posibilidad de profundizar la fe apenas recibida en un curso de introducción a la biblia con el esquema de las comunidades de base que la arquidiócesis de Bangkok ha querido asumir y que promueve en la diócesis.

Los nuevos cristianos que están en este pequeño grupo de introducción a la Biblia son solo 6 personas. Un matrimonio joven, que tienen su propia empresa, una muchacha que es arquitecto, otra que es obrera, otra que es refugiada de Laos y trabaja aquí desde hace algunos años y una señora que se unió hace poco porque dice que está muy confusa de la fe recibida y quiere profundizarla.

Este pequeño grupo de Biblia es para mí también una escuela de “como evangelizar”, de cómo ir  integrándolos en un camino de fe siempre más profundo.   Ellos piensan que bautizándose tienen que rechazar y renegar toda su historia pasada (porque está radicada en el budismo) y ni la consideran cuando tratamos de escuchar la Palabra de Dios Como si se hubieran mutilado bautizándose. La historia personal la consideran como un pasado del cual no quieren hablar, del cual se avergüenzan y solo quieren ver del bautismo en adelante. Por una parte, es cierto y es bello no querer mirar atrás, pero hay que ayudarles a descubrir que Dios estuvo a su lado desde antes de que fueran budistas y más aún, de que nacieran.

 Lo que más les cuestiona es que Jesus vino a salvar a los pecadores.  Que han encontrado la puerta de la fe y han entrado en ella. Que la Iglesia Católica ore por todos incluyendo los no cristianos, que todos estamos llamados a perdonar. Algunos de estos convertidos ya se integraron activamente en la parroquia. Una señora que fue una monja budista, se está preparando como catequista en un curso que da la diócesis de 4 años. Otra muchacha que es arquitecto ya nos está ayudando en la catequesis de los nuevos catecúmenos, ella  se llama Phree dice que  no quiere estar sin leer la biblia porque en su casa todos son budistas y ella quiere perseverar en su relación con Dios.

Lamentablemente el próximo año  seremos solamente 3 Xaverianas en Bangkok y no podremos estar presentes en todas las actividades, pero esperamos que El Espíritu suscite vocaciones misioneras para ayudarnos en la evangelización.

No se les olvide orar por las vocaciones y quien desee compartir su tiempo con nosotros en esta misión, las puertas están abiertas. No se necesita visa tailandesa si se viene por 30 días, solo pasaporte mexicano.